Exigen mayor seguridad en la zona. "No podemos seguir así, pedimos que alguien haga algo", manifestaron.
Vecinos del barrio 500 Viviendas, en la zona norte de la Capital, expresaron su malestar tras un nuevo acto de vandalismo y robo en la Iglesia Espíritu Santo y en la casa parroquial. En menos de 24 horas, delincuentes volvieron a ingresar al templo y se llevaron un tanque de agua de 2500 litros. Además, provocaron daños en el cableado del aire acondicionado.
Nicolás Romero, quien actualmente está encargado de custodiar el templo, manifestó que la situación "es insostenible" y recordó que el año pasado ya sufrieron 10 robos. "Se llevaron sillas, imágenes religiosas y ahora esto... Nos estamos quedando sin nada", expresó con indignación.
El último episodio ocurrió en la tarde de ayer, cuando Romero se ausentó momentáneamente para realizar trámites. Fueron los vecinos quienes lo alertaron sobre lo sucedido. Además, trascendió que uno de los delincuentes habría sufrido una descarga eléctrica mientras intentaba cortar los cables del aire acondicionado.
La comunidad eclesiástica y los vecinos exigen mayor seguridad y presencia policial en la zona, ya que este tipo de hechos delictivos se han vuelto recurrentes. "No podemos seguir así, pedimos que alguien haga algo", concluyó Romero.
