El negativo balance de la gestión de Carlos Pirovano al frente del INCAA
"Pirovano se ha convertido en el único presidente del INCAA en tener el récord histórico de cero películas argentinas aprobadas durante su gestión" acusa el balance.
Imagen ilustrativa.
Después de un año del inicio de la gestión de Carlos Pirovano como presidente del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), el Espacio Nacional Audiovisual presentó un informe lapidario de su gestión. Según el informe, ni una sola película argentina fue aprobada para su producción en todo el 2024 y en lo que va del 2025.
"A lo largo del 2024 y en lo que va del 2025, Pirovano se ha convertido en el único presidente del INCAA en tener el récord histórico de CERO PELÍCULAS ARGENTINAS aprobadas durante su gestión", dice el balance.
A su vez, las entidades firmantes -DAC, APIMA, ARGENTORES y la Cámara Argentina de la Industria Cinematográfica- aclaran que "El presidente del INCAA se comprometió públicamente a cumplir con la Ley de Cine. No solo ha incumplido esa promesa, sino que ha tomado medidas que contravienen su letra y su espíritu”.
El documento subraya que, por primera vez en la historia del instituto, no se aprobó ni un solo proyecto cinematográfico argentino en más de doce meses. Esta parálisis está vinculada, según el informe, a la eliminación de instrumentos clave como la preclasificación de proyectos y la aplicación de medidas que dificultan o directamente impiden el acceso a subsidios. Además, se criticó con dureza la decisión de reemplazar el tradicional sistema de fomento por créditos bancarios, una política que calificaron como “ineficaz y desconectada de la realidad del sector”.
“Ninguna productora accedió a esos créditos, simplemente porque no funcionan en el ecosistema económico del cine”, advierten. También se denunció la aplicación retroactiva del Decreto 984/24, que modificó las reglas de financiación en plena producción, generando “una pérdida significativa de empleo” y poniendo en riesgo el pago de sueldos y cargas sociales.
El informe no se limita a la producción. Apunta también a la reducción drástica del apoyo a la difusión del cine nacional, con la eliminación de herramientas como la cuota de pantalla y las ayudas al lanzamiento. El cine Gaumont, emblema del cine argentino, fue utilizado como ejemplo: “Se lo anunció como el Teatro Colón del Cine Nacional, pero hoy proyecta películas extranjeras que ya se ven en cualquier cadena comercial. El cine argentino fue desplazado de su propia casa”.
Otro punto sensible es el retroceso en la política internacional del INCAA. Argentina renunció a organizar “Ventana Sur”, el mercado más importante de la región para exportar cine local, y se cortó el financiamiento a películas en festivales internacionales.
La paradoja, según el documento, se refleja en la presencia del propio Pirovano en eventos como Berlín y Málaga. “Dijo que no lo veríamos en festivales, pero apareció representando a una industria que él mismo dejó sin películas”, dispararon.
El resultado de estas políticas ya se ve en los números. En 2024, la participación del cine argentino en la taquilla fue de apenas 2,19%, una caída del 60% respecto a 2023, según datos oficiales. “Es la cifra más baja registrada desde que existen estadísticas confiables”, remarcaron.
Las asociaciones concluyen el balance con un llamado urgente a revertir el rumbo: “Desde las asociaciones del sector hemos acercado propuestas para que la actividad audiovisual siga funcionando según la Ley de Cine, e incluso propusimos mejoras. Hemos compartido ejemplos de países como España, Uruguay, Colombia, y Chile, cuyas cinematografías han crecido exponencialmente gracias a políticas de fomento modernas. Y finalmente hemos advertido a las autoridades sobre las consecuencias negativas e irreversibles que tendrían las medidas que anunciaban y que fueron tomando. Lamentablemente, no hemos sido escuchados y hoy, el Cine Argentino atraviesa una crisis sin precedente”.